Tropiezo todo el tiempo con melodías alegres... como si fuese un día de gnomos
Tranquila así, pero igual de lúcida... y me deslumbraban nuestras coicidencias, lejos de nuestras diferencias irremediables, (me miraba tanto así al espejo) hasta que hoy, no hace tanto, se me ocurre una obra de talla monumental y delicada, con esos pequeños cuadros que dan una sensación de infinitud.
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Vidrios rotos